lunes, 13 de abril de 2009

Análisis - Broken Sword: La leyenda de los Templarios

Broken Sword: La leyenda de los Templarios, es el primer título de una serie de aventuras gráficas que cosecharon un gran éxito desde 1996, fecha de su publicación. Recientemente ha aparecido una adaptación para Wii y NDS, ésta última la que he adquirido y he superado con éxito.
Para esta adaptación se ha extendido algo más la historia incluyendo nuevas escenas y puzles a resolver que encajan perfectamente en el anterior hilo argumental. Esta versión se ha post-titulado "El montaje del Director".
Se han remasterizado los gráficos y las escenas cinematográficas para acercarlo a la calidad gráfica actual.

Yo no tuve la oportunidad de disfrutar de este juego en su aparición inicial, y me ha encantado poder disfrutarlo ahora, recordando la esencia de las aventuras gráficas de antaño, con un guión bien elaborado y unos puzles con la suficiente lógica para no perderse buscando en lo absurdo.

Realmente con la NDS resulta extremadamente sencillo e intuitivo jugar a este tipo de juegos gracias al Stylus.

El argumento: Un turista norteamericano llamado George Stobbart (que se convierte, cómo no, en héroe, investigador, y salvador del mundo XD), en compañía de una periodista llamada Nicole Collard, comenzarán una investigación que esconde conspiraciones, cultos y asesinatos, todo girando en torno a los Caballeros Templarios, que les llevará a diversas localizaciones alrededor del mundo, como París, Irlanda, Siria, España y Escocia. (Descripción obtenida de la Wikipedia).

El juego no resulta complicado, siempre que se tenga experiencia en estos juegos y algo de lógica. Además, por si alguien se queda atascado en algún punto, existen pistas que van guiando sobre los siguientes pasos a ejecutar, comenzando con una explicación general, hasta indicar concretamente la acción. Posiblemente el puzle más complicado haya sido uno en el que había que descifrar un mensaje secreto, cambiando cada símbolo por la letra correspondiente. Un segundo puzle con la misma filosofía resultó sencillísimo al haber aprendido la experiencia del primero.

La aventura guia perfectamente sobre lo que se debe hacer, sin permitir perderse prácticamente en ningún momento aunque, sinceramente, esto podría considerarse un punto negativo, ya que en ocasiones resultaba la acción demasiado lineal y guiada.
Personalmente las prefiero un poco más complicadas donde realmente haya que preparar un plan de acción para superar las diversas situaciones, algo que se puede perdonar por el guión tan bien montado que contiene.

Al final, cómo no, ocurre que... bueno, mejor juega y lo compruebas.

He Investigado.

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